Publicado En: Sab, ene 2nd, 2016

Rey Saudí, lanza sangriento mensaje al mundo

Salman, en el poder desde hace apenas un año, también estaría sufriendo muchas presiones dentro de la casa real saudí. Y la milicia terrorista Estado Islámico (EI) declaró la guerra al reino, informó DPA.

Hoy el monarca envió un sangriento mensaje al mundo con la ejecución de 47 personas condenadas por cargos de terrorismo e incitación a la violencia. Con esta actuación parece querer dejar claro que Arabia Saudí está dispuesta a actuar con toda la dureza necesaria contra los grupos terroristas, especialmente contra el EI.

El mensaje sería que se está dispuesto a mantener por todos los medios el poder del país y de su rey. Pero precisamente una de las ejecuciones de hoy, de un relevante chiita, podría hacer peligrar aún más la estabilidad.

Nimr al Nimr era un clérigo de la minoría shíi, que vive sobre todo en la Provincia Oriental del país. En la década de los 80 vivió casi 10 años en Irán, donde estudió el islam shíi. Al Nimr se hizo famoso rápidamente entre los shíies por sus ardientes discursos contra la represión del Gobierno suní, pero también se convirtió en una piedra en el zapato para la casa real.

 

rey arabia saudi

Inspirado por las protestas de la Primavera Árabe, el clérigo de 55 años organizó en 2011 manifestaciones en Arabia Saudí, donde un 15 por ciento de la población es chiita. Fue arrestado en varias ocasiones y la última de ellas, en 2012, generó disturbios durante varios días en su ciudad natal, Qatif. Al Nimr fue condenado a muerte por incitación al conflicto religioso y a la “desobediencia a los mandatarios”.

La ejecución de Al Nimr ha sido una sorpresa, pues era alguien que no cometió actos violentos, apuntó Guido Steinberg, experto en el Golfo de la Fundación Ciencia y Política de Alemania (SWP, por sus siglas en alemán). “El Gobierno saudí va un paso más allá que en los últimos años”, apunta. Y considera que se trata de “una provocación” para los chiitas de la Provincia Oriental, rica en petróleo y donde hasta ahora no había ningún grupo que se enfrentase al poder de Riad.

Pero para Steinberg, las ejecuciones de hoy son sobre todo una reacción del rey Salman a la amenaza de la milicia EI, que avanzó en territorio iraquí hasta la frontera con el reino saudí. El grupo terrorista también actúa dentro de Arabia Saudí, que está implicada en la lucha contra los extremistas. En 2015 el EI reivindicó varios ataques contra mezquitas shíi en el país.

Sin embargo, fue la propia Arabia Saudí la que favoreció el auge de los yihadistas, ya que con sus millones impulsa la difusión mundial del wahabismo, una estricta corriente conservadora del islam. Ahora esa política se le vuelve en contra como un bumerán: uno de los productos de la ideología wahabista es el EI, que desde hace tiempo tiene la mira puesta en el reino saudí y en las ciudades de la Meca y Medina, sagradas para los musulmanes.

Por eso el Gobierno saudí golpea con mayor fuerza contra supuestos terroristas. “En los saudíes estamos viendo la vuelta a una brutal represión”, apunta Steinberg. Las condenas a muerte también pueden interpretarse como un mensaje a los simpatizantes del EI dentro de Arabia Saudí, cuyos métodos recuerdan a las ejecuciones masivas de la milicia terrorista, advierte el experto.

Por otro lado tras la ejecución de Al Nimr, en el este del país surge el riesgo de nuevas protestas chiitas. “Estoy seguro que mi detención o muerte serán un motivo para la acción”, dijo el propio clérigo en un sermón en una mezquita antes de su arresto. La reacción del rey Salman a esas posibles acciones será probablemente contundente.