Aprobada la medida, todos los usuarios tendrán que pagar los cortes y reposiciones de quienes no paguen a tiempo su cuenta de luz. Algo que anteriormente era repudiado por los usuarios que, por atrasarse un día, debían pagar el monto promedio de $12.000 pesos. Esto sucedió a principios de Junio, donde el gobierno logró en el Congreso la aprobación de la denominada Ley de Equidad Tarifaria, que rebajará las cuentas eléctricas de 2,7 millones de clientes, aunque una de las indicaciones contenidas en la iniciativa implicará el traspaso del costo de corte y reposición del suministro a todos los usuarios, incluyendo a aquellos que no caen en mora, generando la polémica del popular dicho “pagan justos por pecadores”.

Aplicar la simple idea de cobrar la reposición dividiéndola en 12 meses a aquellos usuarios morosos, se evita poner en tela de juicio el rol del gobierno de legislar a favor de privados para perjudicar a sus ciudadanos.

Una indicación presentada por la diputada Yasna Provoste -respaldada por el Ejecutivo-, que fue aprobada tanto en la Cámara como en el Senado, dejó en manos de la autoridad la posibilidad de incluir este costo en el proceso tarifario del denominado Valor Agregado de Distribución (VAD), actualmente en marcha.

Así, serán todos los clientes del sistema los que se hagan cargo del costo de la reposición del servicio eléctrico de aquellos que no cumplan el pago a las distribuidoras. El mecanismo actual establece que las distribuidoras están autorizadas a cobrar unos $ 12.000 por este ítem asociado a su servicio.

Desde el Ministerio de Energía señalan que, junto a las diferencias de tarifas en distintas zonas del país, otro de los temas que se abordaron en el proyecto -que ya es Ley, aunque falta su promulgación- tenía que ver con este punto, que busca evitar que las familias que no tengan capacidad de pago vean incrementadas sus cuentas eléctricas producto de este cargo, como sucedería hoy.

“Otro componente de inequidad, que se identificó durante el transcurso de discusión del proyecto de ley, fue la situación en que se encuentra una familia a la que se le corta el servicio por no pago de la cuenta. Entre los problemas que se le generan a la familia hay que considerar que, al no contar con electricidad, los alimentos perecibles se descomponen y también que, al pagar la cuenta, se encuentra con un cargo por “corte y reposición” que eleva la cuenta en $ 12.000, lo que dificulta aún más su pago. Por este motivo, y con el objeto de profundizar el componente de equidad del proyecto, se definió que en el proceso tarifario ciertos Servicios Asociados al Suministro de Electricidad de Distribución (SSAA) se puedan incorporar como parte del VAD”, señalaron desde la cartera.

En 2015, las empresas distribuidoras recaudaron unos $ 13.299 millones (unos US$ 18,7 millones) por este concepto al aplicar el corte y reposición a 1,4 millón de clientes. Este monto, ahora debería ser pagado por todos los usuarios. Al dividir por el número de clientes que cuentan con servicio de distribución eléctrica (unos 6,17 millones), con los actuales parámetros cada uno de ellos podría ver incrementada su cuenta eléctrica en unos  $ 2.154 al año.

Según señaló este medio en marzo pasado, la autoridad estaría estudiando reducir o eliminar este y otros cobros de los denominados Servicios Asociados, y el proceso de fijación de VAD sería la instancia para hacerlo.

Con información de DiarioFinanciero.cl