El papa Francisco dijo hoy que “no existe ningún límite a la misericordia divina ofrecida a todos” y llamó a invertir en la educación, porque es “invertir en la esperanza”.

“Recuerden bien esta frase”, sostuvo el Pontífice en el Angelus, y pidió a los fieles repetir con él el concepto sobre la inexistencia de límites a la misericordia.

El papa recordó por otro lado la importancia de invertir en la educación, porque significa “invertir en la esperanza”.

Jorge Bergoglio lanzó su mensaje a los fieles en la Plaza de San Pedro- alrededor de 70 miles- antes de rezar el µngelus y recordó el episodio bíblico de la resurrección de Lázaro de parte de Jesús en el quinto domingo de Cuaresma.

Lo hizo para ilustrar además “hasta dónde puede llegar la gracia de Dios y por lo tanto hasta dónde puede llegar nuestra conversión, nuestro cambio”.

“Nuestra resurrección comienza aquí: cuando decidamos obedecer la orden de Jesús saliendo a la luz, a la vida, cuando caigan de nuestros rostros las máscaras y reencontremos el valor de nuestro rostro original, creado a imagen y semejanza de Dios”, afirmó el Papa.

El Pontífice invitó a los fieles a “salir” de una vida “falsa, egoísta y mediocre” utilizando el ejemplo del episodio de la resurrección de Lázaro.

“Ahora quisiera hacer un gesto simple para ustedes”, dijo por otra parte al término del Angelus dando así paso a la distribución de miles de copias de bolsillo del Evangelio entre los fieles.

“En los domingos pasados sugería tener un pequeño Evangelio para llevar con uno y poder leerlo con frecuencia”, destacó: “Luego, prosiguió, volví a pensar en la antigua tradición de la Iglesia, durante la Cuaresma, de entregar el Evangelio a los catecúmenos, a los que se preparan al bautismo. Ahora hoy quiero ofrecer a ustedes que están en la plaza, pero como señal para todos, un Evangelio de bolsillo”.

“Será distribuido gratuitamente”, agregó, tras haberlo mostrado a la multitud: “Hay sitios en esta plaza para la distribución. Acérquense y tomen el Evangelio y leanlo cada día: es Jesús que les habla. Es la palabra de Jesús”.

Hoy en día, prosiguió, “se puede llevar la Biblia entera en un teléfono móvil, en una tableta”. “­Se puede leer el evangelio con tantos instrumentos tecnológicos!”. “Lo importante es leer la palabra de Dios, por todos los medios, y recibirla con el corazón abierto”, sostuvo el Pontífice.

El Vaticano ya había anunciado el viernes que, a pedido de Francisco, hoy se repartirían los evangelios de bolsillo a todos los que estuviern a la Plaza de San Pedro para escuchar la oración del µngelus.

Los libros de esta edición, publicada para este evento, fueron firmados por el Vaticano e incluyen los cuatro evangelios y los Actos de los Apóstoles, además de algunas palabras de Bergoglio sobre la Exhortación apostólica “Evangelii Gaudium”.